Artritis reumatoide, ¿se puede prevenir?

  • El avance en el conocimiento de las fases preclínicas de la artritis reumatoide (AR) plantea la posibilidad de prevenir la enfermedad. En esta fase en la que el sujeto está asintomático, las medidas no farmacológicas que puedan prevenir el desarrollo de la AR pueden resultar eficaces antes de las medidas farmacológicas. 

  • El avance en el conocimiento de las fases preclínicas de la artritis reumatoide (AR) plantea la posibilidad de prevenir la enfermedad. En esta fase en la que el sujeto está asintomático, las medidas no farmacológicas que puedan prevenir el desarrollo de la AR pueden resultar clave y ser mejor aceptadas que las medidas farmacológicas. Desde hace un tiempo, los avances en el conocimiento de las fases que preceden al desarrollo de la AR han puesto sobre la mesa la posibilidad de que distintas intervenciones, farmacológicas o no, puedan interferir en el desarrollo de los mecanismos que desencadenan la enfermedad, lo que abre la puerta a la posibilidad de prevención de la misma.

    La influencia de los marcadores genéticos en el riesgo de desarrollar AR es modesta, por lo que los factores ambientales juegan un papel importante en su desarrollo. Se han estudiado como factores ambientales de riesgo para el desarrollo de AR, en individuos predispuestos, el tabaco, la obesidad, distintos hábitos nutricionales, el ejercicio y la higiene dental. Muy probablemente, la intervención sobre estos factores sea más fácil de implementar en una población de sujetos asintomáticos en los que, como se ha demostrado, la instauración de medidas farmacológicas no está exenta de dificultades1.

    Sin embargo, es difícil el estudio del efecto de la modificación de estos factores en la disminución del riesgo del desarrollo de AR, y los resultados obtenidos hasta ahora son escasos, de bajo nivel desde el punto de vista de la medicina basada en la evidencia, y contradictorios.

    El tabaco es el factor de riesgo para el desarrollo de AR mejor establecido2. Distintos estudios observacionales apoyan la disminución, aunque, probablemente, no la desaparición del riesgo de desarrollo de AR seropositiva tras el abandono del tabaco3. Además de estudios observacionales, dos metaanálisis demuestran la relación entre el sobrepeso y el riesgo de desarrollo de AR4,5.

    Aunque la relación entre la obesidad y la actividad de la enfermedad en la AR establecida está bien demostrada, ningún estudio ha evidenciado el efecto de la disminución del peso en la disminución del riesgo para desarrollar la enfermedad.

    En cuanto a la dieta, la evidencia actual sugiere que la nutrición puede jugar un papel tanto en el desarrollo como en el manejo de la AR, aunque los estudios no sean de la mejor calidad. Actualmente se recomienda, en el paciente con AR y, por tanto, en el sujeto en riesgo de desarrollarla, una dieta mediterránea con pescado azul o suplementos de ácidos omega 36.

    Está más demostrada la relación entre la práctica habitual de ejercicio y la disminución del riesgo de AR7, tanto seropositiva como seronegativa, lo que hace del ejercicio una recomendación imprescindible en sujetos en riesgo de desarrollar la enfermedad. A pesar de la relación con la enfermedad periodontal, tanto desde el punto de vista epidemiológico8 como patogénico9, no hay resultados que sustenten una relación directa entre la mejora de la higiene dental y la reducción del riesgo de AR10.

    Por lo tanto, en el momento actual, con la evidencia disponible y en base a beneficios generales en salud, es razonable recomendar, a sujetos con riesgo de desarrollar AR, abandonar el hábito tabáquico, mantener un peso adecuado, realizar una dieta saludable, practicar ejercicio de forma habitual y mantener una buena higiene dental11,12 (Tabla 1).

    Sin embargo, son necesarios estudios para conocer con mayor precisión el efecto real de todas estas medidas en la posible prevención del desarrollo de AR en sujetos predispuestos, con todas las dificultades inherentes a los mismos, como la población a la que deben dirigirse, las intervenciones a implementar o la medición de los desenlaces a evaluar.

    Tabla 1: Medidas no farmacológicas con un posible papel en la prevención de la artritis reumatoide11,12.

    Abandonar el tabaco

    Mantener un peso saludable

    Realizar una dieta saludable

    Practicar ejercicio de forma habitual

    Mantener una buena higiene dental

Autora

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Dra. Ana Ortiz García

Facultativa Especialista de Área.
Hospital Universitario de la Princesa. Madrid

MAT-ES-2400339-V.1-Febrero 2024

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    3. Liu X, Tedeschi SK, Barbhaiya M, Leatherwood CL, Speyer CB, Lu B, et al. Impact and timing of smoking cessation on reducing risk of rheumatoid arthritis among women in the Nurses' Health Studies. Arthritis Care Res. 2019;71(7):914-24.

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MAT-ES-2302052-V.1-Julio 2023

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